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La Princesa Caballero.

Los orígenes del shojo mangaGlénat, siguiendo en la línea de publicar el material del maestro Osamu Tezuka, nos trae una de sus obras más recordadas y queridas: La Princesa Caballero. Esta obra está considerada el primer shojo manga. La que puso las bases para los futuros mangas destinados a chicas que conocemos en la actualidad. Y es que los orígenes de un género, nunca habían sido tan mágicos.ArgumentoTink es un ángel que se dedica a hacer travesuras en el cielo. Pero un día mezcla en una alma que debía ser chica, una parte masculina. Dios, como castigo, le manda a la tierra donde se estará hasta que desaparezca la parte masculina de la chica. Zafiro es esa chica, hija del rey y la reina de Silverland, un país donde las mujeres no pueden reinar. A causa de esta estúpida ley, Zafiro se presentará ante todos como un chico. Pero para una chica, hacerse pasar por chico es algo muy duro. Y por si esto fuera poco, el diabólico duque Duralmin que sospecha que el príncipe en realidad es una princesa intentará demostrarlo a toda costa para que su hijo Plastic, y por consiguiente él, reinen en Silverland.La Princesa Caballero empezó a publicarse en la revista Shojo Club de Kodansha en 1953. Como todo manga de éxito, se hizo una serie de animación. Y es precisamente su anime lo que más recordamos de esta serie (sobretodo los que tenemos una edad), ya que fue emitida en nuestro país en los años 80 por TVE bajo el nombre de "Chopy y la Princesa". La serie se repuso años más tarde en A3. Con el peculiar estilo de Tezuka y con una toque parecido al de Disney, la Princesa Caballero es un cuento de hadas con todos los elementos que no hay que dejarse perder.El Autor y su ObraOsamu Tezuka nació en Toyonaka (Osaka) en 1928. Aunque desde pequeño le gustaba dibujar, su futuro parecía encaminarse hacia el campo de la medicina. Pero no fue así y, en 1946, inició su trayectoria en el mundo del manga, y en 1957 ya era el autor más aclamado de su país. Sus obras fueron las bases del manga que conocemos hoy en día tanto gráfica como narrativamente. Varias de sus obras fueron animadas por la Toei Animation, hasta que en 1961, fundó Mushi Production. La importancia de Tezuka fue tan grande, que en su país de origen es conocido como el "Dios del Manga". Osamu Tezuka murió 1989 y en su memoria se inauguró el Museo Tezuka, dedicado a su obra y figura.Algunas de sus obras más conocidas son:-Astroboy (1952): Las aventuras de un robot en forma de niño que han dado la vuelta al mundo y de la cual se estrenó una nueva versión en anime hace poco. El manga lo publica en España Ediciones Glénat.-Kimba, el león blanco (1951): Las aventuras de un pequeño león criado entre humanos y que está destinado a ser el rey de la jungla. Se dice que Disney se basó en esta obra para crear "El Rey León". Proximamente, Otakuland publicará este manga.-Fénix (1954-1988): Publicada en nuestro país por Planeta, Fénix es la obra más personal de Tezuka. Consta de varias historias independientes, pero bajo el trasfondo del legendario ave Fénix.-Buda (1974): La biografía del personaje de Buda bajo el punto de vista de Tezuka. Ha sido publicado por Planeta.-Black Jack (1973): La obra donde da rienda suelta a su formación como médico. Las historias de un médico clandestino capaz de curar lo incurable. Fue publicada por Glénat parcialmente.-Adolf (1983): Su última gran obra. La historia de los 3 Adolfs bajo el trasfondo de la 2ª Guerra Mundial. Una obra imprescindible que ha sido publicada en nuestro país por Planeta DeAgostini.EdiciónUna vez mas, Glénat nos ofrece una edición muy buena. En formato tomo como es habitual en esta editorial y con papel blanco de gran calidad, sin transparencias. Sentido de lectura oriental y con una cantidad de tinta correcta. Destacar que esta vez y por sólo 8,50€, nos ofrecen un tomo con muchas más páginas de lo habitual. 236 para ser exactos. Su edición es bimestral.ConclusiónLa Princesa Caballero es un manga imprescindible para todos los amantes de los clásicos. La magia que desprende este manga lleno de príncipes, princesas, malos malosos y un sinfín de elementos que hacen de los cuentos algo inolvidable, es algo que encantará tanto aquellos que la recuerdan con cariño de su niñez, como a las nuevas generaciones que tienen ganas de probar cosas nuevas. O simplemente para todos aquellos curiosos por leerse el primer shojo, considerado como tal, aparecido en el país del Sol Naciente. Si te gusta soñar no dejes escapar un cuento hecho manga.